Descripción del evento
Escoger como nombre del grupo el de un barco anclado en el puerto del Lago Michigan puede ser significativo. Apego a las raíces, pertenencia a la comunidad, sencillez y humildad. Todas esas cualidades se dan en el cuarteto de Chicago, THE STEEPWATER BAND. Chicos del barrio que empiezan rindiendo pleitesía a los clásicos del blues por amor a la música, sin ninguna aspiración más tomarse unas cervezas, reunirse en el garaje y tocar, tocar, tocar y volver a tocar, hombro con hombro con los primeros Aerosmith, Bad Company y otros viajeros similares de la fantasía colectiva del rock n’roll. Un sonido personal y una identidad propia, potenciando la melodía sin abandonar la base blues y la pasión por el rock clásico de los setenta. Esa es la fórmula que les ha llevado a compartir tablas con Doobie Brothers, Lynyrd Skynyrd, Cheap Trick, Gov’t Mule o Blackberry Smoke.
Les acompañan Silver Synthetic , genuinos artesanos del rock & roll que quieren devolver al mundo las ganas de boogie con un disco que evoca la era dorada, cuando los últimos coletazos de los 60 entraban en los extraños 70, con los duelos a la guitarra de Verlaine y Lloyd, el zapateo de T. Rex y los giros del folk británico. De beatificar a Lou Reed a improvisar sobre el rock de la tierra de la Silver Bullet Band y el espíritu de los Kinks. Todo en un LP para el sello de Jack White, III Man Records, que no suele fallar en su olfato artístico. Silver Synthetic podrían ser formalistas del rock n’roll, pero son más bien minimalistas centrándose en los esencial de su legado